Igual que vino se fue,
un Abril más para el recuerdo, con sus olores, sus viajes...
Princesas, perdonarme si a partir de ahora se me caen las lágrimas y no consigo explicaros con palabras el por qué. Siento que poco a poco mi mundo se derrumba y me falta el aire y las ganas de sonreir...
Odio los relojes y su manía de no parar quietos ni un segundo.
30. AbriL. 2012